Fútbol popular, nuestros clubs nuestras reglas

El llamado ‘fútbol popular’ nace como respuesta a la pérdida total de protagonismo que ha sufrido lo que ocurre dentro de un terreno de juego para pasar a observarse con mayor profundidad y detalle lo que ocurre fuera del mismo.

El poder de los socios ha quedado muy de lado a la hora de tomar las decisiones que guían el caminar de los clubes profesionales y que los volvieron Sociedades Anónimas Deportivas. Podría calificarse a este tipo de gestiones como ineficaces y que, incluso, en varios casos han llevado a la ruina económica y social. La Unión Deportiva Salamanca, el Club de Fútbol Extremadura o la Agrupación Deportiva Málaga. Estos son solo algunos ejemplos de grandes instituciones que se vieron obligadas a desaparecer.

El Atlético Club de Socios nació en el 2007 y fue fundado por un grupo de socios y aficionados del Atlético de Madrid que se encontraron cansados de la gestión que llevaban a cabo Enrique Cerezo y Jesús Gil Marín. En un acto de inspiración ante algo que ya había ocurrido con el FC United of Manchester decidieron separar su corazón y fundar una nueva institución: ‘El Socios’.

‘El Socios’ es el nombre por el cual es conocido entre sus aficionados, y fue una reacción ante el rumbo que estaban tomando las sociedades anónimas deportivas (SAD) en general. Tanto a nivel deportivo como institucional.

Los primeros años

Si hoy en día hablar de fútbol popular es casi un sinónimo de hablar del Atlético Club de Socios, uno de los grandes responsables es Fernando Sánchez Postigo, actual responsable de comunicación y delegado del equipo. “Intentaron perjudicar, beneficiar nunca y ayudar jamás. Por ello no mantenemos ninguna relación con ellos. El Atlético de Madrid nos conoce. De hecho, nos demandó en 2007, cuando creamos el club, por usar la palabra Atlético”. Explica y da una muestra de que esos primeros años fueron muy complicados a causa de la presión ejercida por el Atlético Madrid.

Sin embargo, bajo la premisa de “un socio, un voto”, ‘el socio’ intenta desde hace muchos años devolver el fútbol a aquellos que realmente viven por y para su equipo. Es decir, los y las aficionadas, y todo bajo una gestión que se basa en la democracia.

Esto quiere decir que cada decisión de las que se toman en el día a día deben ser aprobadas previamente a través de una asamblea. Lo que fomenta la cultura democrática y hace sentir parte al club con la comunidad más cercana.

Este modelo fue muy bien visto a nivel nacional en toda España, y este caso de fútbol popular fue tomando fuerza hasta que se fundó, en el 2013, el Unionistas de Salamanca CF como una especie de tributo al ya extinto UD Salamanca. El Unionistas actualmente se encuentra en la Segunda División B. Tercera categoría del fútbol español. Lo que demuestra que ha sido el club de este estilo con mayor éxito deportivo. Hasta ha llegado a enfrentar al Real Madrid en dieciseisavos de la Copa del Rey. A pesar de que cayó con un digno 3 a 1 en contra.

Otros clubes con el mismo modelo

El fenómeno del fútbol popular comenzó a principios de este siglo en Inglaterra. Cuando los aficionados del extinto Wimbledon FC decidieron crear el AFC Wimbledon cuando la directiva de aquel equipo decidió, de forma arbitraria, trasladar el equipo a Milton Keynes y refundarse como MK Dons.

El de mayor repercusión a nivel internacional, sin embargo, fue el del mencionado FC United of Manchester, creado por un grupo de aficionados para nada felices con la compra y posterior gestión del Manchester United por parte de los Glazer.

Si bien estos fueron los primeros clubs en marcar al fútbol popular a nivel mundial, en España hay varios en la lista. Como el CAP Ciudad de Murcia, que se fundó en 2010 después de que Quique Pina trasladase su ‘proyecto millonario’ a Granada para dar lugar al Granada 74.

El Xerez Deportivo, fue creado en 2013 por el fracaso administrativo y la deuda que acumulaba el Xerez CD. O el UC Ceares que nació en 1946. Y no necesitó una bancarrota para resurgir y adquirir las características del fútbol popular y acogerse a sus principios en el 2011.

La SD Logroñés, es otro caso que se fundó en 2009 tras la desaparición del histórico CD Logroñés.

Muchos son los ejemplos de equipos que se han decidido por el respeto entre sus socios para tomar decisiones importantes de forma   democrática y directa. El fútbol popular llegó para quedarse.